Receta fácil: conejo con cebolla

Hoy vamos a preparar una receta que me encanta, deliciosa y muy fácil de preparar: conejo con cebolla. ¿Os animáis? 

Para empezar, necesitaremos ...

INGREDIENTES PARA 4 PERSONAS.

1 cabeza de ajo partida (8 - 10 dientes de ajo)

1 hoja de laurel

3 o 4 cebollas (al gusto)

1 conejo y medio o 2 (dependerá del tamaño)

1 o 2 tomates rallados (dependerá si son pequeños)

Aceite de girasol

1 vaso de vino blanco

1 chorreón de agua

Y una vez listos todos los ingredientes, ya podemos empezar a prepararlo. Veamos los pasos.

1. En una sartén, echamos aceite de girasol y los ajos y cuando esté caliente, echamos los trozos de conejo, a los que previamente habremos añadido sal.

Sartén con aceite y ajos, lista para freír

Antes de freír el conejo, no hay olvidar echarle la sal.

 2. Una vez que los trozos estén fritos, los vamos apartando en una fuente y vamos echando el resto de trozos a freír, haciendo lo mismo, hasta que todo el conejo este frito.

Freímos el conejo

Conforme lo freímos, vamos poniendo el conejo en una fuente.

3. En una olla aparte, echamos un poco de aceite (el mismo de haber frito el conejo), la hoja de laurel y la cebolla, que previamente habremos cortado en julianas, y la vamos friyendo lentamente, para que se vaya pochando. A continuación, añadiremos un poquito de sal y, cuando la cebolla esté a medio freír, añadimos el tomate. Si vemos que la salsa se va secando, añadiremos un poquito de agua y si no, solo añadiremos el vaso de vino, ya que si está bien, con el vino ya es sufiente.

Echamos el aceite, la cebolla y la hoja de laurel.

Rayamos el tomate.

Añadimos el vino y esperamos a que la cebolla se vaya pochando

4. Una vez que el vino haya evaporado, añadiremos un poquito de pimienta y añadiremos más sal si vemos que es necesario.

Esperamos a que el vino se evapore y añadimos un poco de pimienta

5. Echaremos el conejo, que ya hemos frito previamente y dejaremos que cueza con la cebolla, para que vaya tomando el sabor.

Añadimos el conejo junto a la salsa, para que tome sabor.

Una vez hecho todo esto, ya estará listo para comer. También podéis preparar esta receta de un día para otro, ya que es un plato que en mi opinión, está más bueno al día siguiente.

¡Y ya tenemos el conejo con cebolla listo para comer!

Nota: a quién no le gusta el conejo, puede seguir la misma receta, cambiando el conejo por pollo, ya que de este modo, también está riquísimo. 

¿Que os ha parecido?

Espero que os haya gustado ... ¡buen provecho!